La precisión en la valoración de daños es fundamental en el trabajo del perito de seguros. Un error en este proceso puede tener consecuencias significativas tanto para el asegurado como para la compañía. A lo largo de mis 15 años de experiencia, he identificado patrones recurrentes que llevan a estimaciones incorrectas. En este artículo, analizamos los diez errores más frecuentes y cómo evitarlos.
1. Inspección superficial del siniestro
Quizás el error más básico y, sin embargo, sorprendentemente común es realizar una inspección apresurada o incompleta del siniestro. La presión por completar múltiples visitas en un día puede llevar a pasar por alto daños que no son evidentes a primera vista.
Cómo evitarlo: Establece un protocolo sistemático de inspección que cubra todos los aspectos relevantes según el tipo de siniestro. Utiliza listas de verificación específicas para cada tipo de peritaje y reserva el tiempo adecuado para cada visita.
2. Documentación fotográfica insuficiente
Las fotografías son la evidencia principal que respalda tu valoración, pero muchos peritos no documentan adecuadamente todos los ángulos y detalles necesarios, o toman imágenes de baja calidad que no permiten apreciar la magnitud real de los daños.
Cómo evitarlo: Documenta fotográficamente el siniestro de forma exhaustiva, incluyendo planos generales, detalles de cada daño, y elementos circundantes relevantes. Asegúrate de que las imágenes tengan buena iluminación y resolución adecuada. Organiza las fotografías de manera sistemática en tu informe.
3. No considerar daños ocultos o consecuenciales
Centrarse únicamente en el daño visible e inmediato sin considerar posibles daños ocultos o consecuencias a medio plazo es un error que puede llevar a infravalorar significativamente un siniestro.
Cómo evitarlo: Desarrolla una mentalidad investigativa que vaya más allá de lo evidente. Pregúntate: “¿Qué daños podrían no ser visibles ahora pero manifestarse más adelante?” En siniestros complejos como daños por agua o estructurales, considera la posibilidad de solicitar pruebas específicas o la opinión de especialistas.